skip to main | skip to sidebar
LOS MONTOTO

últimos comentarios


NUESTROS BLOGS PREFERIDOS

  • Pajaritas de papel de Nacho Montoto

NUESTRAS WEBS

  • abuelo cumple 80 años
  • Luis Montoto
  • Nacho Montoto
  • Santiago Montoto

PEÑA "MONTOTO Y MÁS"

  • PEÑA "MONTOTO Y MÁS"

lunes, 22 de febrero de 2016

QUERIDO AMIGO

Quien no caería en la tentación: la de robar. ¿Quién daría, quien podría dar significado tal a “carta de hija monja”, de amigo, mejor que tú? Que de tan grave tentación, se haga tanta emoción.
Tu amigo estaría orgulloso al poder contemplar cómo tan bellas palabras alzan el vuelo en forma de “Pajarita” de tanta y tan profunda Filosofía particular.
Yo me atrevería a decir que ese “amigo” al que tu robaste tan delicada y expresiva e intima confesión al padre, esa preciosa y precisa manera de contar su vida conventual, que no solo no se enfadaría contigo, creo sinceramente que al leerla se atrevería a decir: ¡Estimado Don José: pues no que esta muchacha se le parece tremendamente hasta incluso en la forma de escribir! ¡Si no fuera porque es hija mía, hasta diría: “demonio de muchacha” pues no que me ha hecho llorar, al igual que hizo llorar a usted su queridísima hija la más pequeña al contarle de sus amores! ¡Pues no parece que se hayan puesto de acuerdo éstas nuestras hijas en todo lo concerniente a sus vidas, a sus inquietudes, a sus pasiones, a sus amores, a su entrega a Dios!
Lógico es que haya caído usted en la tentación Don José. Querido amigo mío créame si le digo que si hubiese sido al contrario yo hubiera o hubiese caído en la misma tentación y obrado en la misma forma que usted, sin dudarlo, esa “carta” es de lectura obligada y orgullosa pasión para cualquier padre, para cualquier amigo, para cualquier conocido o simplemente para cualquier sobrina o sobrino que tuviera la inmensa suerte de que cayera en sus manos y leerla, creo que hasta cualquiera de ellos tendría y caería en la misma tentación, y, creo sinceramente que sería una verdadera injusticia no hacer lo mismito que en su día hizo usted.

Si así fuera, Don José, espero que sepa y pueda usted disculpar a quien en esa tentación cayera, lo mismo que en este caso lo disculpé yo a usted.
                                  
                                      Su más que afectuoso y querido “Amigo”     
                                                                         
                                          Caí en la Tentación

Miércoles de ceniza, andaba yo pensando en una “Pajarita” que rimase con el significado de este día. Y cuando más perdido y más desorientado me encontraba, sentí una tentación: la de robar. Yo había visto una carta sobre la mesa de una persona amiga. Miré, curioso, el sobre, y él me dijo: “es carta de mi hija en que narra su dicha en el convento”. Y yo entonces pensé en que lo que dijera la monjita podría venir de molde en este día. Conque mientras mi amigo se distrajo leyendo unos papeles, yo me guardé la carta que transcribo. Que perdone mi amigo, que perdone la monja, y tú, lectora joven ve cómo piensa y siente una muchacha de tu misma edad.
“Queridísimo papá: Hace tiempo que tengo muchas ganas de escribirte y ya no lo difiero más, pues entra Cuaresma y no podría hacerlo aunque quisiera. ¿Es algo que tengo que decirte? En concreto, no; pero si ganas de hablarte de verdad de cosas así generales, pero de una manera particular y más intima que cuando escribo para toda la familia.
A mí me pasa que soy en gran parte como tú; a veces pienso que me diste mucho de tu carácter y de esa especie de doble personalidad o fases de tu persona; que tú tienes una por fuera ante la gente, callado y poco comunicativo, y otra en tu interior, distinta, que vive lejos de aquello que le rodea, en un mundo interior que se te escapa sólo por la pluma, que puesta entre tus dos fases traiciona tus secretos.
De veras papá, que tengo mucho de este tu carácter que sólo explico de paso, pues ya de sobras conoces, y tú sabes que con él se goza mucho y se sufre mucho; quizás no sepa decir qué sobresale más, si el sufrir, o ese gozo especial que de nuestro mismo sufrir a solas, y considerando como sólo cerrado y vedado a nosotros, se desprende.
Tú hablas mucho de la vida y de lo que ésta te trajo y zarandeó. Papá, la vida, a mí, tan chica en edad cuando entré en el Noviciado, ya me había hablado muy claro. La vida, siendo tanto, no es nada; y siendo nada, es mucho sin embargo. Yo sé lo que quiero decir con esto. A mí se me presentaba tan vacía que me enloquecía pensar que fuese así. Desde antes de entrar en el Noviciado, más concreto desde la santa muerte de mamá, yo lo veía todo horriblemente vacio. Fue entonces abrir los ojos a la realidad y contemplar que era fea, e insuficiente todo cuanto lleva el sello de lo mortal para ser digno de vivirse si no hay algo espiritual que le dé un valor imperecedero y lleno; y esto sí que lo hay aún en lo más trivial, y es el hálito divino, el espíritu de Dios llenando por doquier el Universo que Él creó y mantiene; su voluntad en todo.
Esta participación de Dios en su propia obra que es el mundo, la buscaba yo entonces, pero se me ocultaba, y estaba como descentrada sin hallarla. Tú, que percibes lo que no se dice con palabras, has tenido que notarlo en mi entonces e incluso en el Noviciado. Te digo en verdad que yo estoy hecha por Dios sólo para la vida religiosa; no podría vivir fuera. Por eso éste es mi lugar. Pero el convento exige mucho, lo exige todo. Este todo es de proporciones tan gigantescas como lo es la personalidad humana con todos sus atributos y ambiciones. No hay libertad ni para hacer ni para no hacer lo que se quiere; se hace todo como si una no fuese persona con voluntad. Así está ordenada nuestra vida, a toques de campana, y a no ser, ni para la menor cosa, “yo”, sino una esclava.
Esto es maravilloso y santificante; la vida religiosa es una de esas que yo antes llamaba llena con el lleno de la verdad de lo que es, y participa de algo que no es humano ni perecedero. Pero esto a veces cuesta mucho, y se tienen que ir dejando atrás pedazos de la propia vida, lo que no se hace sin que la naturaleza proteste y, a veces, mucho. Ya te digo que mi vida es ésta sin dudarlo, y en otro lugar no podría realmente vivir; mas esto no se opone a que exija constantes y muchas renuncias. Pero todo esto hace mayor el mérito, más dura la adquisición de una santidad que Dios exige, y más grande e intima la satisfacción de dárselo.
También en el convento hay alegrías papá; o mejor diría gozos; gozo íntimo produce esta misma vida cuando al fin se rinde una a Dios y se logra apagar todas estas rebeldías que nos levantan queriendo exigir lo nuestro. Los goces de la vida espiritual son inmensamente mayores que todos, y el gozo de vivir una vida que es llena de la única verdad, no se puede comparar con nada.
Dirás que estoy filósofa, pero no olvides que es que he cursado filosofía en el curso pasado; aún cuando una cosa es la Filosofía, y otras mis filosofías. Bueno papá, no te rías de mí; pero es que tenía esta tarde muchas ganas de charlar un rato contigo, que nunca lo hago. Hasta otra, si Dios quiere.
Un abrazo fuerte, grande y apretado, con todo el cariño de tu hija”.
Y como en la “Pajarita” de hoy no puse sino el prólogo, no es justo que fe la firme por entero. Pondré solo
                                                                                                                                                                                               MONTOTO
Publicado por Unknown en 8:49

0 comentarios:

Publicar un comentario

Entrada más reciente Entrada antigua Inicio
Suscribirse a: Enviar comentarios (Atom)

estamos online

Archivo del blog

  • ►  2019 (2)
    • ►  mayo (1)
    • ►  enero (1)
  • ►  2018 (1)
    • ►  diciembre (1)
  • ►  2017 (2)
    • ►  julio (1)
    • ►  enero (1)
  • ▼  2016 (11)
    • ►  marzo (3)
    • ▼  febrero (7)
      • PETICIÓN ACEPTADA Y CUMPLIDA
      • QUERIDO AMIGO
      • HERMANAS
      • NO HAY RAZÓN
      • SEÑOR: ¡QUE YO NO OLVIDE NUNCA ESAS SONRISAS!
      • GRACIAS, SEÑOR, GRACIAS, CONCHA
      • LA MUERTE TRISTE
    • ►  enero (1)
  • ►  2015 (1)
    • ►  septiembre (1)
  • ►  2013 (8)
    • ►  junio (2)
    • ►  mayo (3)
    • ►  enero (3)
  • ►  2012 (9)
    • ►  noviembre (1)
    • ►  octubre (3)
    • ►  junio (1)
    • ►  mayo (3)
    • ►  abril (1)
  • ►  2011 (11)
    • ►  diciembre (2)
    • ►  septiembre (3)
    • ►  julio (1)
    • ►  mayo (3)
    • ►  marzo (1)
    • ►  enero (1)
  • ►  2010 (180)
    • ►  noviembre (5)
    • ►  octubre (2)
    • ►  septiembre (4)
    • ►  agosto (1)
    • ►  julio (1)
    • ►  junio (11)
    • ►  mayo (24)
    • ►  abril (7)
    • ►  marzo (18)
    • ►  febrero (43)
    • ►  enero (64)
  • ►  2009 (206)
    • ►  diciembre (47)
    • ►  noviembre (36)
    • ►  octubre (10)
    • ►  septiembre (16)
    • ►  agosto (1)
    • ►  julio (1)
    • ►  junio (5)
    • ►  mayo (21)
    • ►  abril (19)
    • ►  marzo (23)
    • ►  febrero (27)

Etiquetas

  • ABUELA
  • ABUELO
  • ACTIVIDADES
  • ANÉCDOTAS
  • BIOGRAFÍA DE JOSÉ MONTOTO
  • BRUNO
  • CITAS
  • CONCHA MF
  • CONTACTO
  • CRISTINA
  • CRISTINA RAMÍREZ M.
  • DE TODO UN POCO
  • Duelo
  • FELICITACIONES
  • Fotos
  • HOMENAJE
  • IGNACIO
  • INMA
  • INSTRUCCIONES
  • ISABEL Mª
  • ISABEL ML
  • JAVIER ML
  • JESÚS CM
  • JOSÉ LUIS MC
  • MAMEN
  • MARTA
  • MARUJA
  • MONTOTADA
  • NACHO
  • NURIA
  • ONOMÁSTICAS
  • PAJARITAS DE ISABEL
  • PAJARITAS DE PAPEL
  • PEPA
  • RAFAELA
  • RECORTES DE PRENSA
  • RECUERDOS DE FAMILIA
  • RICARDO
  • ROCÍO MC
  • SALUD
  • SANTIAGO
  • TERESA CORDÓN
  • TÍA MARÍA
  • TÍA TOTE

Para Leer: Nacho Montoto. Mi memoria es un tobogán/Espacios Insostenibles

 
happie de BlogMundi